Sagrada Familia (Credito: google)
“Con corazón de padre: así José amó a Jesús, llamado en los cuatro Evangelios «el hijo de José»”
(Carta Apostólica Patris Cordes, Padre Francisco)
A las puertas de la celebración de la Navidad del Señor, en diciembre de 2020, nuestro Papa Francisco proclamó un año entero dedicado a San José, el padre adoptivo de Jesús. Según el Papa, este año de San José tiene como objetivo: aumentar nuestro amor por este gran Santo, sentirnos impulsados a implorar su intercesión e imitar sus virtudes..
Motivadas por esta invitación de nuestro pastor, en junio de 2021 promovimos un momento formativo sobre la Devoción a San José en nuestra Congregación para todas nuestras postulantes, novicias y junioras, a través de encuentros online, con la presencia de nuestra Madre General, Lina María Girotto, de las Consejeras Generales, María das Dores Paz y Gleicy Kelly Rocha y de las Hermanas Formadoras que acompañan a esas jóvenes.
El compartir el tema profundizó cómo esa devoción fue vivida por nuestras Fundadoras y por nuestras primeras Hermanas, cómo los documentos oficiales de la Congregación tratan el tema, cómo nuestras Superioras Generales animan y motivan a nuestras Hermanas a profundizar cada vez más en la preciosidad de esa devoción y el compromiso que cada una de nosotras tenemos hoy ante la persona de San José.
Realmente fue un momento muy rico de comunión y enriquecimiento mutuo. Durante toda la duración de la presentación del tema, nuestras Formandas tuvieron la oportunidad de hacer preguntas y compartir sus propias experiencias.
Que San José, ejemplo del confiado abandono en la Divina Providencia, interceda por nosotras para que seamos fieles al designio de Dios como lo fue él.
Aprovechamos este espacio para presentar a todas nuestras FORMANDAS y pedir oraciones por ellas, por la intercesión de San José.
Para mí fue un aprendizaje y un gran incentivo frente a todo lo que ya escuché sobre San José y de lo que ya fui testigo. El cariño, la fe y el testimonio de las Hermanas ancianas me motivaron aún más a conocer y profundizar la vida de San José. San José siempre será el elegido de Dios como providencia para el cuidado de María y Jesús, y que hoy somos nosotras testigos de la fidelidad al proyecto de Dios.
Hna. Ediléia
En la vida de nuestra Congregación, las Hermanas, desde el principio, siempre han recurrido a la protección de San José. Se le venera por su ejemplo de total abandono a la Divina Providencia y se le confía como guardia y protector. Todavía hoy, todos los miércoles, las Hermanas, en oración, invocan su auxilio..
Hna. Leonor
Con alegría tuvimos la gracia de participar de la formación del Juniorado Interprovincial, aprendiendo y recordando sobre la Devoción a José en nuestro Instituto de las Hermanas Benedictinas de la Divina Providencia.
Para mí fue un momento muy especial, ya que pudimos ver cómo las Hermanas, desde el inicio de la Congregación, alimentaron una veneración especial por este Santo. Un hecho que pudimos comprobar a través de documentos, constituciones, libros de oraciones y Hermanas que vivieron intensamente esta devoción, como por ejemplo: Hna. Faustina Oldani, Hna. Maurizia Laboranti y Hna. Maria Stefanina Cei.
Además, las Cartas de nuestras Madres Generales que siempre nos invitaron a mirar a San José, como modelo e inspiración, destacando algunas características según el tiempo y las exigencias de cada época. Gracias Hna. Gleicy Kelly Rocha por la iniciativa.
Irmã Poliana
Queridas Hermanas y amigos! Que la Gracia, que fue dada para todos nosotros en un año dedicado a San José, nuestro querido padre adoptivo.
Cuando leí la Carta Apostólica Patris Corde del Papa Francisco, me quedé mucho más encantada con San José: padre de ternura, obediencia, coraje creativa y tantas otras virtudes presentadas. Pero, cuando estudiamos sobre San José en la Historia de Nuestra Congregación, pude contemplar un padre cercano que nos estuvo ayudando en nuestro día a día. Además, percibí el cariño de nuestras Hermanas, tanto en los documentos cuanto en la vivencia con Él. Él, se torno mucho mas cercano de mi corazón.
Además, fue fantástica la interacción con las Juniores de la Provincia Divina Providencia, conocerlas y escuchar algunas historias que ellas vivieron con otras Hermanas y con San José. Agradezco inmensamente por la oportunidad de aprender sobre la Congregación y así amarla mucho más. Que María y Giustina Schiapparoli nos conduzcan por el camino del seguimiento fiel a Cristo.
Hna. Mayara
El día 22 de junio, nosotras las Junioras, tuvimos la gracia de tener un momento de formación sobre la devoción a San José con la Hna. Gleicy Kelly Rocha, la Hna. María das Dores y nuestra Madre General Madre Lina María Girotto. Lo que quedó más fuerte para mí fue el hecho de fortalecer la importancia de la presencia de San José en nuestra vida como Hermanas Benedictinas de la Divina Providencia ya que son muchas las veces que lo invocamos como guarda y protector porque fue custodio del Niño Jesús, de la propia luz; con amor y confianza supo abandonarse en los brazos del Padre dejándose conducir por su voluntad.
Percibir esta mirada en nuestra historia es muy gratificante, es la figura de un hombre, como nosotros, que se despoja de si para recorrer los caminos trazados por Dios, llevando consigo al proprio Cristo. Nuestras Fundadoras y Hermanas comprendieron muy bien esto, por eso está siempre presente en nuestras vidas intercediendo ante las necesidades de sus hijas. Quiero mencionar aquí a la Hna. Faustina Oldani quien es, para muchos, un gran ejemplo de Madre y maestra que supo testimoniar con su vida el espíritu de fe, sacrificio y oración; algunas de las virtudes aprendidas de su gran amigo San José a quien acudía con un cariño singular.
Que San José nos enseñe a acoger cada vez más la voluntad de Dios en nuestra vida, a percibir su amor por cada una de nosotras y sobre todo a ser conscientes de la luz que llevamos dentro y que es el propio Cristo. Que los pasos dejados por nuestras Hermanas nos impulsen a hacer de nuestra vida una oración que nos interpele a ir al encuentro del otro, colocándonos al servicio como lo hizo San José llevando en sus brazos a Jesús y poniéndose a camino en compañía de la Virgen María.
Hna. Julieta
San José siempre aceptó la voluntad de Dios en su vida y la cumplió plenamente…
En la vida de nuestra Congregación, las Hermanas, desde sus orígenes, han recurrido siempre a la protección de San José. Él es especialmente venerado por su ejemplo de total abandono a la Divina Providencia, en las casas y comunidades de la Congregación encomendadas a él como guardián y protector.
Mientras reflexionaba sobre esas palabras, soy muy agradecida a él porque yo misma empecé a creer en sus milagros y le confié la protección de los miembros de nuestra Familia. A medida que fui conociendo un poco de la historia de su vida, comencé a venerarlo.
“Señor, ningún ojo vio, ningún oído oyó, ningún corazón concibió las cosas que has preparado para los que te aman… Quémanos con el fuego del Espíritu Santo, para que te amemos en todo y sobre todo y así reciba las recompensas que nos prometiste.”
Hna. Narmada
Desde la formación sobre la devoción a San José en nuestra congregación, mi amor y devoción por San José aumentaron. Fue un momento precioso para conocerlo y aprender de su vida a cultivar sus virtudes en mi día a día.
También a través de esta formación pude ver y sentir la experiencia de nuestras Fundadoras y Hermanas sobre San José en nuestra Congregación. La experiencia de nuestras Hermanas me ayuda a entender más claramente sobre él.
Hna. Abha
En la vida de San José, para mí conmovedor y fuerte fue su obediencia a la voluntad de Dios. San José, el padre adoptivo de Jesús, no se sentía pereza o vacío, pude sentir que su corazón estaba lleno de alegría, él estaba muy feliz de estar preocupado por María y Jesús. Cuando el ángel apareció en un sueño y le dio el mensaje para ir a Egipto, él no pensó por qué debía soportar todas esas luchas en la oscuridad y caminando por la colina, sino que simplemente obedeció y dependió de Dios. Ese ejemplo lo traigo a mi vida: la obediencia y la dependencia de Dios. Dios me llamó a experimentar su amor y compasión en mi misión y comunidad.
Qué responsabilidad yo recibo, Dios está ahí para guiarme y bendecirme para obedecer su voluntad en mi vida. A través de mi formación en la Devoción a San José, aprendí a acoger la voluntad de Dios en mi vida y a tener más fe en él.
Toda la clase me ayudó a experimentar su amor y también a aumentar mi devoción a San José. Gracias Hermana por ayudarme y guiarme.
Hna. Mary
En primer lugar, estoy muy feliz y satisfecha de haber tenido la oportunidad de participar en las aulas sobre la Devoción a San José en nuestra Congregación. Realmente fue una gran y maravillosa experiencia en que pude conocer la presencia de San José en la historia de nuestra Congregación en momentos de necesidad para nuestras Hermanas y en los momentos difíciles.
Lo más significativo y conmovedor para mí es cuando nuestra Madre Giustina recibió un cuadro de San José como regalo, el 19 de marzo de 1864, de parte del Monseñor Giuseppe Reguzzi, en agradecimiento por las oraciones hechas por su curación. Fue agradable y hermoso extraer la devoción a San José de nuestras fundadoras y me hizo parar para cultivar mi devoción a San José y sentir su presencia amorosa como mi padre amoroso.
Hna. Anusha
Varias cosas me tocaron en San José, aquí compartiré algunas de ellas:
- El sueño de San José. Principalmente el momento en que se dejó guiar por Dios en todo. Acoger fielmente el proyecto de Dios. Aprendí a vivir la voluntad de Dios con fe y fiel a mi vocación.
- San José vivió para los demás y no para sí mismo. Mencioné este punto porque sirve incluso en nuestra vida comunitaria. Somos llamadas a vivir para los demás y no para nosotros mismos. Ayudar a otros a vivir bien en el nombre de Dios. San José vivió su vida en comunidad.
- La fidelidad de San José en tiempos difíciles. El momento en que él fue a Jerusalén a buscar a Jesús en el Templo y la hora en que María estaba a punto de dar a luz, y no había lugar para que ella diera a luz a su hijo Jesús. En todas las situaciones, José estuvo presente. Él fue persistente y fiel en la voluntad de Dios.
En mi vida diaria le pido a Dios esta gracia de la fidelidad en todo lo que hago. Porque eso es lo que me ayuda a ser testigo de lo que Dios guardó en mí para vivir en su misión.
- La devoción de San José. Antes, yo no tenía la devoción a San José como la tengo hoy. La gente hablaba más de las gracias recibidas por la intercesión de San José. Para mí fue como una historia. Hoy, soy una de las devotas de San José porque ahora sé quién es él, a través de las oraciones y de la formación que tuvimos sobre su vida en nuestra Iglesia y en nuestra Congregación.
Hna. Prisca
Queridas Hermanas, Formandas y miembros de la Familia Espiritual Benedictina, es con gran gratitud que comparto con ustedes todas las experiencias que tuve de San José, a través de la formación con la Hermana Gleicy Kelly Rocha.
El Santo Padre el Papa Francisco, inspirado por Dios, instituyó este año 2021 como Año Josefino, para que todos los fieles católicos puedan experimentar los misterios de la vida de este gran Patrono de la Iglesia de manera profunda.
La Hna. Gleicy Kelly Rocha, preocupada por las formandas, decidió profundizar con nosotras la vida de este gran santo y su devoción en nuestra Congregación.
Vimos que en la vida de nuestra Congregación, desde sus orígenes, las Hermanas siempre recurrieron a la protección de San José. Él es venerado especialmente por su ejemplo de total abandono a la Divina Providencia.
Muchas de nuestras Hermanas se apegaron a este gran Santo que nunca las defraudó cuando recurrieron a él. Tuve la gracia de vivir con algunas de estas Hermanas y pude cultivar mi devoción a este Santo. De hecho, San José me sorprende a cada día, a través de su sutil presencia en mi vida.
Mi mayor deseo era hacer el silencio interior, pero nunca lo conseguía. Cuando descubrí que San José es el Santo del Silencio, comencé a invocarlo en este sentido. Me sorprendí de mí misma, porque estoy logrando hacer un silencio interior fantástico, gracias a Él.
La fe silenciosa de San José, le dio sentido, a todos los acontecimientos de su vida, tanto felices como tristes.
Queridas Hermanas, vale la pena cultivar la devoción a este gran Santo, porque él nunca defrauda a quienes confían en él.
Novicia Ana Na Man
* San José es el Santo Patrono de la Iglesia Universal.
* Nuestras Hermanas de la Congregación, desde sus orígenes, siempre se colocaron bajo la protección de San José.
* Nuestras Hermanas tienen una profunda devoción a San José.
* Nuestras Constituciones, la biografía de Madre María y Giustina Schiapparoli, la devoción a San José, la confianza en la Divina Providencia, su vida sencilla y activa, me fortalecen para vivir la espiritualidad de nuestras Fundadoras.
* y tener una buena relación con las hermanas y cultivar el silencio y ser obediente a ellas.
Novicia Mamatha
* San José es el santo Patrono de la Iglesia Universal.
* San José es un modelo para mí, he cultivado una gran devoción por su persona.
* Yo reflexioné sobre San José como mi protector, guardián y aquel que cumple la responsabilidad que recibió de Dios.
* Cuando reflexiono sobre la vida de San José también me pregunto cuál es la responsabilidad que Dios planeó para mí, en mi vida.
* Como este año está dedicado a San José, por su intercesión, le pido a Dios que me haga ser más fiel para cumplir el plan de Dios en mi vida como lo fue San José.
Tengo presente la imagen de San José cuando tengo un problema o cualquier cosa que necesito, la escribo en una hoja y la guardo bajo sus pies, entonces San José sueña y sucede muchas cosas con éxito en mis oraciones. A través de San José aprendí la obediencia, el silencio, la honestidad.
Novicia Geetha
Las primeras Hermanas depositaron su confianza en San José y él realmente les fue fiel. Ellas dependían de él en varias ocasiones. San José fue un santo fuerte y presente en la vida de nuestras Comunidades que dependían de su protección. San José me inspira a vivir una vida de silencio, porque percibió que en el silencio se encontraba a Dios y a sí mismo. El testimonio de las Hermanas sobre la fuerte devoción a San José me dio una gran motivación para practicar la misma devoción.San José era un santo de oración; por eso me da un ejemplo de colocar la oración antes de todo lo demás.
Novicia Susan
A partir de la formación sobre la Devoción a San José en nuestra Congregación, lo más fuerte para mí, lo más significativo que me conmovió profundamente, fue:
* El regalo especial. La pintura de San José que Monseñor Giuseppe Reguzzi les regaló a María y Giustina Schiapparoli en agradecimiento por las oraciones realizadas por su curación me conmovió profundamente, porque muestra que la devoción de las Hermanas a San José era bien conocida y ellas lo expresaron a lo largo de su misión. La impresión tiene un gran significado en nuestra Congregación, ya que muestra que todo bien o acción nunca quedará sin recompensa.
* La historia de la Hna. Faustina y como ella recibió dinero para pagar la cuenta – Un milagro realizado por Dios a través de San José, a quien tenía una gran devoción. La historia me enseña y me anima en mi devoción a San José y también aumenta mi fe en él como nuestro santo patrono.
* Las palabras de la Madre Clara Venturini sobre San José, me enseñan que no tengo que escuchar mucho a la gente para ser quien soy yo o quien soy llamada a ser. Lo que importa y lo que debe importar es lo que Dios habla y quiere de mí como una novicia, así como San José.
Novicia Mary
De la formación sobre la devoción a San José en nuestra congregación, ¿qué fue para mí lo más fuerte, más significativo que me conmovió profundamente?
“El amor y la paz de Dios habitan en mi corazón”. Durante la formación aprendí varias cosas sobre São José.
Que nuestra Congregación le tiene gran devoción; desde la época de nuestras Fundadoras hasta la actualidad.
A él confiamos nuestras casas y las comunidades de la Congregación, como guardia y protector. Es venerado por su ejemplo de total abandono a la divina providencia.
Nuestras Hermanas le tienen un gran amor. Todo está bajo su protección.
Para mí lo más fuerte, lo más significativo, lo que me conmovió profundamente de este Santo de la Iglesia es su sencillez de vida, su humildad para ver las cosas y la acción con amor en el corazón.
Todo habla en el silencio de San José, lo que quedó en mi pensamiento fue esta frase: “Es en el silencio que se actúa”.
Postulante Sofy
De la Formación sobre la Devoción a San José en nuestra Congregación, lo que más me llamó la atención fue ver la devoción de nuestras Hermanas a San José, el amor, la entrega, la confianza.
También es interesante porque San José es mucho más que el padre adoptivo de Jesús. Cuando el Papa Francisco proclama este año 2021 como el año Josefino, el objetivo es llevarnos a meditar más sobre este gran Santo y Patrono de la Iglesia Católica. Él tiene muchas virtudes maravillosas que merecen ser reflexionadas y experimentadas en nuestras vidas. Si Jesús se convirtió en un gran hombre fue gracias a su padre San José, quien le enseñó a ser un hombre justo, prudente y de mucha oración.
Me gustó saber más sobre este gran Santo y me ayudó a aumentar aún más mi devoción por él.
Postulante Marta
Desde que entré a la Congregación, siempre escuchaba a las Hermanas hablar mucho sobre San José, pero parecía algo tan alejado de nuestro Carisma, del ser Benedictina.
Escuchaba decir que él era el cuidador de la casa, porque siempre que salíamos una de las Hermanas decía: “San José, cuida nuestra casa”. Hasta que una vez escuché de la querida Madre Clara Venturini estas palabras: “San José es el hombre del silencio, el hombre del confiado abandono en la Divina Providencia”.
Y ella, muchas veces, solía decir esa frase, pero yo solo la escuchaba por solo escucharla. No le daba mucha importancia. Y cuando el Papa Francisco dedicó este año a San José, donde se presentaron más características de este Santo, fue donde realmente pude entender por qué las Hermanas siempre pedían su protección, su intercesión y realmente pude comprender mejor esa característica del confiado abandono en la Divina Providencia que él vivió.
A través de la formación con la hermana Gleicy, eso se fundamentó aún más y realmente iluminó y reavivó la llama de la devoción en este gran santo.
¡Este momento formativo fue muy bueno, muy propicio y de mucha riqueza! Compartir historias, legados que dejaron nuestras Fundadoras y primeras Hermanas, fortaleció nuestra devoción y también nuestro camino vocacional, que, como San José, no siempre entendemos. ¡Aprendemos con este Santo que es necesario confiar en Aquel que nos da la misión!
¡La formación terminó dejando un sabor de “quiero más” en cada una de nosotras!
Postulante Maria Antônia
De la formación sobre la Devoción a San José en nuestra congregación lo más fuerte y conmovedor para mí fue que, desde el nacimiento de nuestra congregación, después de que la semilla fue plantada en nuestras fundadoras María y Giustina, San José ha sido un poderoso protector y guarda para ella.
Como un buen sembrador, él me pide a mí, su hija, esta maravillosa virtud: imitarlo en la dedicación a aquellos que el Señor coloca en mi camino.
Me resultó muy interesante que San José tuviera un abandono total en la Divina Providencia, aceptó la voluntad de Dios que se manifestó de manera inexplicable e irracional, y se dedicó totalmente al Hijo de Dios, de una manera extraña y misteriosa.
A través de San José, modelo para aquellos que le suplican, recibí incentivo en mi vocación y un llamado a seguir más de cerca a Cristo en la Vida Religiosa, ya que él siempre permaneció unido a Dios.
Finalmente, a partir de la formación, fue significativo para mí que a través de San José todo es posible. El Monseñor Reguzzi recibe la curación a través de las oraciones hechas a San José.
Postulante Linet
Lo fuerte para mí fue el regalo especial del retrato de San José, de Monseñor Giuseppe Reguzzi a nuestras Fundadoras. Fue recibido hace mucho tiempo, pero para su reverencia, todavía se mantiene actualizado. Muestra cuán fuertes ellas eran para San José y el respeto que le tenían.
Algo que amo y valoro no puede alejarse de mis manos ni hacerle nada malo ni olvidarlo, siempre lo guardaré dentro de mi corazón.
No puedo olvidar a San José en mi vida, tengo que cultivar una fuerte devoción por él, que está dispuesto a interceder por mí en cualquier situación de mi vida, y él siempre me protegerá e intercederá por mí a través de la Divina Providencia, así como él lo hizo con su familia en Nazaret.
La fidelidad de nuestras Hermanas, que siguen manteniendo la devoción a San José hasta el día de hoy, me trae un llamado a ser siempre fiel a lo que querían nuestras Fundadoras. Un impulso para la fidelidad al Carisma de la Congregación, viviendo el Carisma en todos mis pequeños deberes de la vida.
Eso también lo veo en las palabras de nuestras Superioras Generales que siempre nos recuerdan y nos animan a cultivar una fuerte devoción a San José diariamente. Eso me lleva a incrementar mi amor por San José, a sentir que estoy probada, animada a implorar la intercesión de San José y a imitar sus virtudes para siempre en mi vida.
Postulante Violet
Para mí, el punto fuerte sobre San José es que él es mi protector. Él era una persona obediente. Él siempre hizo la voluntad de Dios. Entonces su obediencia me conmovió profundamente. Somos bendecidas de tener a San José como Protector de nuestra Congregación. Pido su ayuda para aumentar mi amor por él.
Postulante Vereesha
De la formación sobre la Devoción a San José en nuestra Congregación, lo más fuerte para mí fue que él era una persona fiel y obediente. E él hizo la voluntad de Dios. Él es el protector de mi vida. Quiero aumentar mi amor y devoción por él.
Postulante Alekhya
En esta formación sobre San José, lo que me llamó la atención fue que él siempre fue obediente, fiel y humilde. Él creyó en el mensaje de Dios a través de sus sueños. A través de su amor y cuidado, Jesús creció en sabiduría y conocimiento. Pido la intercesión de San José para que crezca en la fe y en la vida espiritual.
Postulante Alphonsa
En la formación sobre San José, experimenté que él es un padre en mi vida. Espero que él me ayude. Me gusta su cuidado y su por Jesús. San José se nos presenta como ejemplo de total abandono a la Divina Providencia. Le pido que nos ayude y nos dé el coraje para tener fe en Dios. Que él me ayude a ser sencilla y humilde en mi vocación.
Postulante Jyothsna